A través de la introducción de metodologías activas, tecnologías innovadoras y la provisión de kits de robótica, se capacitó a docentes y directivos para liderar este cambio pedagógico, siguiendo cinco componentes fundamentales. En primer lugar, se realizó un diagnóstico para identificar las brechas y oportunidades. Posteriormente, se apoyó la actualización del currículo, con un enfoque en la resolución de problemas reales y el desarrollo del pensamiento crítico. Además, se ofreció formación en STEM+, metodologías de aprendizaje activo y enfoque de género. También se fortalecieron las competencias de liderazgo de los directivos y se promovió la integración de la inteligencia artificial en la gestión institucional. Por último, se respaldó la implementación de proyectos STEM+ con estudiantes para abordar necesidades específicas del entorno.  

A lo largo del desarrollo de la iniciativa, se creó una serie audiovisual que documenta, a través de imágenes y testimonios de estudiantes, docentes, padres, madres y representantes de las comunidades el proceso de cada institución educativa en el proyecto y cómo este ha contribuido en el abordaje de las problemáticas de cada territorio.